Malestar por administración del agua en parroquia Flores, Chimborazo
Por: Marcos Illicachi, COCIF
En la parroquia Flores, cantón Riobamba, los miembros de la Junta Comunitaria del Agua Potable manifiestan su inconformidad con algunas disposiciones emanadas por la Secretaría Nacional del Agua, SENAGUA, insta instancia que regula el uso del agua en el país.
Uno de los directivos comunitarios señala que “nosotros no queremos que el agua administre ni la junta ni el Municipio, queremos administrar nosotros mismos, pero sí queremos la sentencia que nos habilita a administrar a nosotros el agua. Aquí hay algunos discapacitados, somos mayores y no tenemos plata para pagar lo que quieren ellos. Haremos lo que decidamos en la asamblea”.
Los directivos de la comunidad añaden “queremos hacer nuestra propia administración comunitaria de la junta de agua, no queremos que el agua sea privada ni tampoco pública, sino que mantenga la junta administradora del agua el carácter comunitario”.
Al manifestar su interés por hacer su propio reglamento de aguas, acorde a las necesidades y disponibilidades propias de la comunidad, añaden “lo que nos ordena la SENAGUA no vamos a hacer porque nosotros con la asamblea tenemos que decidir lo que podemos pagar, eso es lo que vamos a decidir. Nosotros vamos a administrar como junta de agua comunitaria”.
En el sector rural ecuatoriano existen iniciativas sociales y comunitarias para encargarse de los servicios de agua y saneamiento para las poblaciones ahí asentadas. En este contexto, se han constituido figuras locales denominadas Juntas Administradoras de Agua y Saneamiento, que en muchos de los casos han demostrado ser una solución real, concreta y eficaz para los mejorar el acceso a servicios de agua y saneamiento de las poblaciones rurales.
A pesar de la informalidad en su constitución, estos operadores comunitarios han sobrevivido en el tiempo y son grupos permanentes que vienen dando una respuesta con alto contenido social. En el Ecuador, no menos de 4 millones de personas acceden o tienen la esperanza de acceder a agua y saneamiento seguros gracias a este importante pero aún poco reconocido prestador de servicios comunitario.