EDITORIAL

Fidel, que la Historia le juzgue

Por: Elsa Claro —Noticias Aliadas

Circunstancias diversas hacen difícil asumir el legado del líder histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, quien falleció el 25 de noviembre, a los 90 años de edad.
Este hombre fue culpable de convertir a una pequeña isla del Caribe, amenazada por invasiones, sabotajes y un salvaje bloqueo económico-financiero, en un sitio con una tasa de mortalidad infantil de 4.8 por cada 1,000 nacidos vivos (en 1959, cuando triunfó la Revolución, era de 70 por 1,000).
La vehemencia humanista de Fidel dio talla a un país donde, según el Banco Mundial, no existía nada parecido a un centro de estudios científicos. Hoy, entre otros, está el Instituto de Investigaciones Biotecnológicas y la Industria Médico-Farmacéutica donde se crearon vacunas únicas (meningocóccica, hepatitis B, cáncer avanzado del pulmón), medicamentos (anticuerpos monoclonales, interferones, cura del pie diabético) o productos destinados a la agricultura y la veterinaria. La población tiene una expectativa de vida superior a los 74 años (era de 61) consecuencia de la cobertura sanitaria universal y un celoso enfrentamiento a las enfermedades infecciosas y no transmisibles.
Desarrollo unido con la solidaridad en 120 países: 250,000 colaboradores de la salud durante el último medio siglo, incluyendo la asistencia a sobrevivientes de los terremotos en Pakistán, Indonesia, Haití o en el enfrentamiento del ébola en Sierra Leona. Asimismo, 20,786 profesionales de la salud, procedentes de 74 países, incluyendo estadounidenses pobres, se graduaron ya en la Escuela Latinoamericana de Medicina.
Desde Cuba se propicia también la Operación Milagro, que hizo cirugías oculares gratuitas a 10 millones de personas en todo el continente y dejó instaladas clínicas oftalmológicas en varias naciones. Cifra similar se da en 30 países, con el método de alfabetización de adultos Yo sí Puedo. Palpables son los avances en el ámbito de la computación y la más amplia gama de especialidades técnico-profesionales que convierte a Cuba en el país con mayor tasa de graduados universitarios y técnicos medios del hemisferio. Al propio tiempo, se formaron profesionales, en distintas especialidades de Asia, África y Latinoamérica.
El desarrollo en salud y educación son sello de identidad en los últimos 60 años, pero no menores son los avances del deporte (entre los siete primeros países) y la cultura (el Ballet Nacional de Cuba se considera uno de los mejores). La electrificación del país (más del 95% del territorio), construcción de presas, carreteras y vías férreas, viviendas populares, hospitales, escuelas, no tiene antecedentes ni en número ni en calidad.
Cuba encara el siglo XXI más industrializada. Amplía su infraestructura y pese a las deficiencias que acumula, sobresalen esos éxitos movidos por la desprendida pasión de Fidel, orientando los caminos principales por donde fue la Mayor de las Antillas, hacia cuanto más necesita y enaltece a las personas.
Déjese que la Historia califique a quien acaba de irse. Digo…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *