EDITORIAL

Las promesas anti derechos de los presidenciables

Hace unos días se desarrolló un debate con casi la totalidad de candidatos a la Presidencia de la República, salvo el de gobierno. Se nos privó así a la ciudadanía de escuchar sus propuestas y conocer la fortaleza o debilidad de sus argumentos, algo sin duda reprochable.

En general el debate se desarrolló en un ambiente en el que las propuestas claras y técnicas estuvieron ausentes, primando mayormente planteamientos de salida simple y fácil a los grandes problemas del país. Como en un partido de futbol las barras de los candidatos explotaban de emoción con cada oferta de los presidenciables.

Este editorial no tiene por intención decirle por quien votar o no votar, pero si contarle que algunas de las promesas que escuchamos de los presidenciables van en contra de tratados internacionales de derechos humanos, y son en esencia demagógicas, peligrosas o ridículas. He aquí algunas de las perlas que se dijeron en el debate y que afectan nuestros derechos.

Como solución a la corrupción un candidato propuso crear a jueces sin rostro, algo por lo cual existen condenas internacionales a otros países que tomaron esa medida. En la misma tónica otro candidato dijo que si fuera por él, le cortaría la mano a los corruptos, algo que evidentemente viola derechos. Una candidata dijo que lograría que la corrupción se persiga como delito de lesa humanidad, cuando esa categoría solo se utiliza para los crímenes de guerra, la ejecución extrajudicial y otras graves violaciones de derechos.

En cuanto al problema de la delincuencia. Un candidato propone instaurar la pena de muerte, con lo que viola la Convención Americana de Derechos Humanos y la Constitución; otras propuestas fueron: armar a los padres de familia, dar más poder a las empresas privadas de seguridad, cuando en realidad el garantizar la seguridad ciudadana es una obligación del Estado y en concreto de la Policía. En la misma línea, la propuesta de sacar a las calles a las fuerzas armadas no es adecuada ya que la institución prepara a gente para combatir en la guerra y no para disminuir la delincuencia, son cosas muy distintas.

Varios candidatos propusieron subir las penas para los delitos, esto pese a que se subieron recientemente con el nuevo Código Orgánico Integral Penal y que se ha comprobado que la medida no soluciona el problema de la delincuencia en absoluto,mientras que por otra parte sí obliga a construir más cárceles debido al masivo hacinamiento de personas, todo esto sin proponer una solución de fondo, seria y real, a la pobreza que aqueja al Ecuador.

Esta es nuestra opinión pero para hacerse su propio criterio sobre estas y muchas otras propuestas, le invitamos a escuchar de nuevo el debate en la página de youtube de la Cámara de Comercio de Guayaquil, así como también a informarse por todos los medios sobre los planes de gobierno de los presidenciables.

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