Extractivismo minero afecta a la Amazonía ecuatoriana

Lisseth Zhuma

En el marco de la conmemoración del Día de la Amazonía Ecuatoriana, Jhanira Sensu, dirigente de la mujer, derechos humanos y familia de la Asociación Shuar Sevilla Don Bosco de Morona Santiago, se refiere a la contaminación y conflictos sociales a raíz de del extractivismo minero en territorio amazónico. Ve con preocupación cómo, las decisiones gubernamentales y sin consulta previa, atentan contra la vida de la naturaleza y quienes la habitan. “Yo vivo en el Valle del Upano y ya está contaminado, hay concesionarias mineras que están ingresando de manera ilegal, que nos están dejando sin nuestra comida, sin nuestra pesca”, señala.

La Asociación Shuar, como organización base de la CONAIE, ha pedido que no se deje por fuera la problemática del extractivismo, que, además, se agravó con la pandemia y que pone entre la espada y la pared a la población. En palabras de la dirigente, “… la minería trae enfermedades, pobreza, destrucción del medio ambiente y conflictos sociales. Hay personas que viven del día, [y] con esta situación de la pandemia […] el gobierno primero nos dijo quédate en casa, y al quedarnos todos en casa, muchos perdieron sus empleos, y ahora los mineros se aprovechan diciendo, ven trabaja, te vamos a pagar tanto. Las mismas personas indígenas de las diferentes nacionalidades se meten (en la minería) por la necesidad de recursos económicos, por la necesidad de la sobrevivencia. Ahí trae los conflictos sociales, porque es cierto que cierto tiempo, en algunas asambleas, se dijo no a la minería, no a la contaminación; sin embargo, le ponen entre la espada y la pared. Realmente, la situación que estamos viviendo, es muy trágica aquí en la provincia de Morona Santiago […]”. 

Siendo conscientes de la necesidad de ingresos económicos y como una alternativa a la actividad minera, Jhanira Sensu, comenta que han generado espacios para la venta de productos elaborados por mujeres shuar. Especialmente con la venta de productos de la zona, la venta de artesanías y la venta de gastronomía. “Tenemos en la asociación unas casetas que realmente no son las adecuadas, no tienen los servicios básicos. Pero las mujeres tienen ganas de superarse y de decir voy a vender lo que hago, lo que yo sé y me representa algo de recursos económicos para poder llevar un pan a mi hogar. Realmente como mujeres amazónicas, las mujeres de mi nacionalidad Shuar, estamos preocupadas por la gran escala que viene y que ya están concesionados nuestros territorios”. 

Para la dirigente shuar de la Asociación Sevilla Don Bosco, es lamentable que nadie reconozca los esfuerzos que hacen por la defensa de la naturaleza y que son necesarios recursos económicos en el territorio para reforestar e impulsar otras acciones.