Discriminación racial en Ecuador

Liseth Zhuma

Andrés Padilla, joven afro ecuatoriano, falleció luego de ser impactado por una bala
de dotación policial el 23 de agosto de 2018 en el sector de Mascarilla, provincia de
Imbabura.

Jimmy Ocles, el 10 de diciembre de 2021, fue detenido arbitraria e ilegalmente en
los exteriores de un centro comercial en Quito, después de retirar dinero de un
cajero del Banco Internacional. Luego fue acusado de robo, recibió insultos y
agresiones físicas durante su período de detención.

Carlos Reyes, joven artesano de 29 años, del Cantón Muisne, el 18 de diciembre de
2022 sufrió actos de tortura y discriminación por estereotipos raciales, por parte de
las Fuerzas Armadas.

Para Rosa Bolaños, Asesora Jurídica de INRED, estos no son casos aislados, sino
que responden a una problemática estructural de discriminación racial y son
inconstitucionales, por no respetar y garantizar el derecho igualitario de las
personas.

En este marco, preocupan leyes como la de uso progresivo de la fuerza porque
pueden legitimar la impunidad. Por ello menciona que “estas categorías son
sospechosas, utilizan el discurso de porque es una persona afro, porque es una
persona de tal nacionalidad o porque es una persona en tal situación de movilidad
humana, es la carga que tuvimos en el 2019 o en 2018 y es a quien se le va a
relacionar o vincular directamente con el conocimiento de delitos. Entonces, es allí
donde esta ley, por esta amplia discrecionalidad, nos preocupa que materialice esta
impunidad…”

Por ello, para enfrentar esta problemática, Rosa Bolaños, indica que “estamos a
tiempo con la objeción presidencial, es decir, qué se aprobó y qué no se aprobó, y
con ello tal vez utilizar esta parte de lo que son las garantías constitucionales. Pero
de ahí tener un cambio en esta parte estructural que se mencionaba, es decir, cómo
abandonamos estas ideas de seguridad nacional propias de los ochenta,
sesentas… y cómo se abarca a una verdadera política criminal o a una verdadera
política de seguridad… La voluntad no sólo está en el Estado, sino que el Estado
también enfrenta una situación que no se abre a más voces dentro del sector de la
academia, la organización civil, incluso, comunicadores independientes,
comunicadores digitales… Por ahí deberían estar estas cuestiones de superar la
problemática estructural, de lo que es toda esa idea de seguridad nacional
tradicional… No es qué puede hacer o qué no puede hacer un miembro de la
policía, sino cómo debería hacerlo…”