Mujeres organizadas se pronuncian por disolución de Asamblea Nacional

Andrea Quijije García, Movimiento de Mujeres por la Justicia

Las mujeres organizadas del país, ante los hechos ocurridos y el decreto
presidencial donde se disuelve la Asamblea Nacional del Ecuador, se pronuncian y
expresan:

1. Ratificamos que somos un Estado democrático, independiente, libre y soberano,
donde las mujeres hemos construido bases con la lucha colectiva, recordando que la
libertad, la independencia y la soberanía, son los elementos básicos del desarrollo
de los pueblos.

2. Que las mujeres ecuatorianas queremos recordar los aportes que hacemos
diariamente a este país para que sea grande. Mujeres trabajadoras, empresarias,
políticas, jornaleras, cuidadoras de la naturaleza y la vida. Mujeres que con el
esfuerzo y el trabajo han construido escenarios que han logrado grandes conquistas
humanas.

3. Las mujeres ecuatorianas queremos proclamar el compromiso y la fortaleza, poder y
decisión, para contar con una Asamblea Nacional de acción política, de mayorías
sociales, de vocación para servir contra todas las cosas que se presenten en el país.
Contar con mujeres y hombres que reafirmen su compromiso con la población
ecuatoriana.

4. Las mujeres ecuatorianas exigimos desechar los privilegios que han desprestigiado
a la democracia. Somos el motor del país, somos las que siempre salimos a
defender los derechos, la libertad y la democracia. Somos las madres que exigimos
justicia, las mujeres políticas que enfrentamos un espacio que aún sigue siendo de
machos, somos las que levantan la bandera violeta, que significa la lucha para
erradicar la violencia.

Hoy debemos seguir luchando por estas cosas y por todas las cosas que se
presentan y afectan a las mujeres, por todas aquellas que ya no están, se lo
debemos. Ha llegado el momento de desenmascarar el sistema patriarcal, indolente y machista que no ha sabido reconocer las violencias que vivimos las mujeres, ni los
grandes aportes que hemos hecho a lo largo de la historia.

Con todo esto, las mujeres ecuatorianas quieren seguir en este camino difícil de
lucha, pero que tendrá grandes satisfacciones cuando logremos una sociedad libre
de violencia.