10 de diciembre: Día Internacional de los derechos humanos. Situación en el Ecuador

La pobreza en el Ecuador sigue siendo muy elevada, alcanzando cifras alarmantes de más del 70% en muchas zonas rurales sobre todo donde predomina la población indígena y negra. Las desigualdades sociales siguen siendo enormes y la brecha entre pobres y ricos es cada vez mayor. En la actual situación del país solo uno de cada tres ecuatorianos tiene un empleo formal y se siguen perdiendo empleos como consecuencia de la crisis energética y de la delincuencia. La pobreza aguda que afecta a las zonas urbano-marginales ha servido de caldo de cultivo para que miles de jóvenes, muchos menores de edad sean captados por los grupos de delincuencia organizada para cometer crímenes. Casi todos ellos han dejado de estudiar.

El gasto estatal en salud y educación sigue siendo insuficiente, hay muchas necesidades no cubiertas en escuelas y hospitales. Los magros resultados de los estudiantes en las pruebas PISA evidencian el bajo nivel de la educación pública (y también de la privada) en el Ecuador. Las mafias corruptas incrustadas en hospitales y centro de salud controlan las compras de medicamentos e insumos, afectando notablemente el servicio que reciben los pacientes e impactando negativamente al presupuesto de salud.

El decreto ejecutivo 954 emitido por Guillermo Lasso permite a las empresas mineras transnacionales comenzar sus actividades sin el consentimiento libre, previo e informado y aunque la Corte Constitucional declaró su inconstitucionalidad ha permitido que siga en vigencia, vulnerando los derechos de pueblos indígenas   campesinos de las zonas que van a ser explotadas en provincias como Imbabura, Cotopaxi, Azuay y Morona Santiago. En cambio, la minería ilegal, vinculada a los grupos de delincuencia organizada, está destruyendo a pasos agigantados la naturaleza y envenenado los ríos en varias zonas de la Amazonia, sin que prácticamente haya control ni persecución por parte del gobierno y las fuerzas del orden. El gobierno de Noboa tampoco ha cumplido con su compromiso con la iniciativa mundial de apagado de los mecheros en los campos petroleros.