Cuando escuchamos o leemos algo sobre el “11-S” o “11 de septiembre” usualmente se nos viene a la mente los atentados terroristas contra las Torres Gemelas, el Pentágono y otros objetivos. Producto de estos ataques terroristas aproximadamente 3000 personas murieron y más de 6000 fueron heridas.
La imagen que tenemos en la retina del “11-S” es la de un avión comercial estrellándose premeditadamente contra un edificio, luego recordamos ver por televisión a un tal Osama Bin Laden, quien adjudicaba los atentados suicidas a su grupo Al Qaeda y justificaba sus acciones basándose en que los Estados Unidos son el símbolo del capitalismo y del odio contra el islam, además por su ocupación militar en países islámicos y su respaldo a Israel.
Lo ocurrido en los Estados Unidos es una de las páginas más oscuras de la historia moderna, representa la barbarie y es sin duda uno de los peores actos terroristas ocurridos por la destrucción y muerte que causó. Un acto reprochable que debe ser condenado y rechazado sin dudarlo un solo segundo. Producto del “11-S” los Estados Unidos entraron en una lógica de guerra sin cuartel por todos los medios (legítimos e ilegítimos) contra un enemigo que les era difícil identificar, atacando muchas veces a países y seres humanos inocentes.
Ahora no podemos tampoco olvidar otro acto ocurrido en Chile no hace mucho. Refresquemos la memoria, el 11 de septiembre de 1973 una facción de las Fuerzas Armadas y de Carabineros efectúo un fuerte ataque militar cuidadosamente planificado en el cual se bombardeó el “Palacio de la Moneda” es decir la Casa Presidencial, como consecuencia de lo cual murieron muchas personas incluido el Presidente Salvador Allende.
Aquello fue un golpe de Estado por el cual se defenestró al Presidente democráticamente elegido siendo remplazado luego por una dictadura encabezada por Augusto Pinochet. Este fue el inicio de un régimen militar ilegítimo que se prolongó hasta el 11 de marzo de 1990. Durante este periodo las violaciones de derechos humanos fueron el pan de cada día, se estima según cifras oficiales que 200.000 personas tuvieron que exiliarse, 29.000 sufrieron prisión ilegal y tortura, 3000 fueron asesinadas y 1200 se encuentran desaparecidas.
La razón del golpe de Estado fue que Allende era considerado un “comunista” y por tanto un peligro para los Estado Unidos, esto porque sus políticas que buscaban justicia social e igualdad para los chilenos, afectaban los intereses de las numerosas empresas estadounidenses en especial de las mineras. Hoy con documentos desclasificados se conoce con total certeza que los Estados Unidos en colaboración con la extrema derecha y grupos de empresarios financiaron, planificaron y realizaron el golpe de Estado para que sus intereses económicos no sean afectados.
El mensaje que les queremos transmitir es que es necesario hacer memoria de los 2 ataques terroristas ocurridos el 11 de septiembre, recordemos no solo los atentados terroristas salvajes de los cuales fueron victima los EEUU realizados por extremistas islámicos. Pero también recordemos el ataque terrorista y la dictadura sangrienta provocada por los EEUU en Chile. Los 2 hechos son reprochables y merecen nuestro rechazo pero sobre todo nuestra memoria para evitar que vuelvan a ocurrir.